Love the Tuenti's: Los 2000 fueron muy fuertes.

Love the Tuenti’s Festival: ¡los 2000 fueron muy fuertes!

Pocas épocas se han vivido con tanto furor, y es que ¡los 2000 fueron muy fuertes!
Bajo un eslogan más que acertado, Love the Tuenti’s se ha convertido en el primer festival de música de una época que marcó nuestras vidas.
Tras el éxito de su primera fiesta en mayo de 2018, Sharemusic decidió deleitarnos este verano con un Love the Tuenti’s mucho más grande y renovado, convirtiéndose así en un festival en Madrid al que más de 30.000 personas han acudido para rememorar momentos mágicos de la escena musical de los años 2000.

Las altas temperaturas no fueron impedimento para disfrutar del festival. Tres escenarios en el recinto de Ifema: dos de ellos cubiertos y perfectamente climatizados, y otro al aire libre que contó en todo momento con chorros de agua saliendo del escenario.

Aunque el empeño de la organización fue mantener frescos y a gusto a todos los asistentes, la magnitud inesperada de la que ha sido la primera edición de Love the Tuenti’s, hizo que algunos detalles como esperas en las barras y baños y algún que otro descontrol en las puertas, haya provocado las quejas de muchos de los asistentes. Aun así, está claro que estamos ante “El festival de nuestra vida” según las declaraciones de la mayoría.

Fallos técnicos aparte, es de destacar todas y cada una de las actuaciones que fueron, sin excepción, de 10.

¡Vaya, vaya! En Love the Tuenti’s sí hay playa.

Así es, Love the Tuenti’s nos adelantó que uno de los escenarios se llamaría “Playa Mix”, lo que no imaginábamos hasta llegar al festival fue, que la playa era literal. Arena, hamacas, chiringuitos, flotadores… y por supuesto ¡chorros de agua saliendo del escenario!

Un espacio repleto de gente desde el inicio del festival hasta el final, como una verbena, como una charanga, o una fiesta entre amigos, el escenario Playa Mix nos mostró el lado más canalla del festival con actuaciones como las de Las Ketchup, King África, Raúl, El Koala y Azúcar Moreno, entre otros.

Pero sin duda, lo que más destacó de este escenario fue su gente y sus ganas de pasarlo bien a toda costa.

La música electrónica que sigue llegando a nuestro corazón.

El Dance Stage vio pasar durante 13 horas ininterrumpidas a los artistas más punteros de la música de baile de la primera década de los años 2000.

Un esectáculo presentado por Dj Neil que amenizó junto a Dj Marta y Jumper Brothers los ratos entre los conciertos, con música, monólogos y, por supuesto, un “A por el bote” inmenso donde participó todo el público, dedicado especialmente a David Broncano.

Pasada la medianoche los djs de la sesión Jumper Brothers & Friends tomaron el relevo en un set que duró hasta las 6 de la mañana.

Entre todas las actuaciones en directo, la maravillosa Kate Ryan brilló más que nunca: “désenchanté”, “ella ella” y un público cantando a pleno pulmón.
Sylver destacó por su dulce voz que protagonizó el mejor directo de la noche, y Dee Dee y La Luna por la unión de sus voces en un concierto de música que sigue llenando nuestro corazón.
El dúo más aclamado de la noche, las diosas de dos himnos de la música dance de los 2000: Maria Dacal y Eva Marti cantando al mismo tiempo “Fly on the Wings of love” y “Flying free”. Como resultado, un pseudo remix elaborado en puro directo, difícil de superar.

La sesión de Barthezz, dj y productor que no estaba anunciado en el cartel ni horarios del festival, fue la sorpresa que puso la guinda a la noche en el escenario Dance. Empezando y terminando con su conocido “On the move”, pasando por temas menos mainstream de lo que estamos habituados en este tipo de fiestas, como “Insane” de Dark Monks, o “Airport” de Armani & Ghost.

Pero sin duda, Safri Dúo podrían llevarse el premio en este escenario. Los daneses demostraron que el talento les pertenece y que la música corre por sus venas. No importa el tiempo que pase, sus baterías, bombos y timbales siempre están listos para sonar a ritmo de “Samb adagio”, “Played a live” o “Baya baya”. El dúo tuvo tiempo de agradecer el apoyo de sus fans y de tirar sus baquetas al público al final del directo. Una auténtica maravilla.

Andy y Lucas, el plato fuerte del escenario Pop.

Por su parte, el escenario Pop fue un auténtico viaje en el tiempo a través de los temas que marcaron a toda una generación. Presentado por el locutor y presentador Fernandisco, los asistentes pudieron disfrutar de los grande éxitos de grupos y solistas como Efecto Mariposa, Alex Ubago o El sueño de Morfeo, que se reunieron en exclusiva para el festival después de años sin tocar juntos.
Pignoise fue uno de los grupos más esperados y la energía de Despistaos fue inigualable.

Aun así, la luz que desprendieron Andy y Lucas eclipsó por completo todo lo que pudiera rodearles. El dúo, que aún sigue cosechando éxitos, no dudó en volver a 2003, cuando su primer disco salió a la luz con “Son de amores”. Pudimos ver en el escenario a un Andy y Lucas más cercanos que nunca, tanto con su banda, como con su público. Un público más que enloquecido, que llegó a saltar la valla hasta llegar al foso para disfrutar del directo tan cerca que incluso pudieron tocar a los artistas. Bailes, dedicatorias, palmas, ¡illo!, !ay mi ‘arma’! Las baladas pop de Andy y Lucas enamoran hasta al público masculino. Uno de los mejores momentos de la noche, sin duda.

Tras las actuaciones, la música continuó hasta las 6 de la mañana de la mano de varios djs como Las gatas que tiran pa’lante, Kako y Flaca, entre otros.