La estética urbana y la electrónica underground juntas bajo un mismo techo. Así ha sido Absolut Manifesto 2019: “We are a new World”.
Porque los festivales ya no son sólo para el verano, Absolut Vodka nos trajo el 1 y 2 de febrero de 2019, la segunda edición de su fiesta ABSOLUT MANIFESTO, esta vez, bajo el lema: “We are a new World”.
Un encuentro en el pabellón Satélite de Madrid que nos brindó la oportunidad de disfrutar de música y arte simultáneamente, además de valorar el respeto, la igualdad y diversidad.
El festival arrancó el viernes, un día especialmente pensado para los verdaderos amantes del techno o, más bien, de la electrónica incatalogable.
El madrileño Yanik Park fue el encargado de abrir el festival y, aunque su sonido relajado le defina en cada sesión, dejó un listón alto cargado de mezclas y matices electrónicos.
Octo Octa, le siguió el ritmo, esta vez con toques refinados y melódicos.
Electrónica perfecta para ir calentando motores y contemplar la performance de Filip Custic, una obra maestra que no esperábamos ver (y palpar) así.
Custic fue en sí mismo la obra. Sentado, rodeado de espejos hechos a medida, pasó el artista visual durante unas dos horas siendo el centro de atención de Absolut Manifesto.
Una escultura humana, que no dirigía palabra ni movimiento, sólo se prestaba para ser parte de esa foto egocéntrica que todo espectador se hizo a la fuerza junto a él. El artista, dejó a disposición de los asistentes, más espejos adaptados para que cada uno formase parte de su performance como quisiera.
La noche se fue calentando con la danesa Courtesy quien trajo una sutil oscuridad mezclada entre Dance y House. Ya estábamos preparados para todo lo que llegara. Buena zapatilla, buenos bailes, y nuestro Shazam a punto de explotar fichando tantos temazos.
El plato fuerte lo puso la esperadísima Honey Dijon. Directamente desde la tierra del House, la diosa del beat. Se nota que cuando dice que España es su destino favorito para pinchar, es totalmente cierto, porque puso toda la carne en el asador. Esta mujer imparable nos contagió toda su energía. “Woman of the Ghetto” de Marlena Shaw, el remix de Agent Sumo de “Shoulda Woulda Coulda”, “Like This” de Slam y Chip E., el remix de Floorplan del “Beautiful People” de Barbara Tucker… El House y el estilo Hip-Hop se fusionaron para cerrar la primera noche de Absolut Manifesto 2019 por todo lo alto.
Tras un viernes de electrónica, un sábado cargado de artistas urbanos donde se respiraba mucho aire “trap”.
Madrid ya no es lo mismo que hace unos meses, el “urban style” ya no llama al postureo y los eventos no se llenan (casi) de una pasarela de modernos canis. Ahora se nota a quién le gusta este género de verdad y lo disfruta con el corazón.
Con un público notablemente más joven que la noche anterior, el sábado arrancó con la sesión de Alvva que ya despertó y agitó a las masas nada más llegar.
Después, la actuación de Sticky M.A. que fue un punto muy positivo y destacable del festival. Acompañado de su productor, Royce Rolo, el cantante dedicó el escenario para mostrar toda su obra. No vino solo: Lil Moss y Moonkey aparecieron fugazmente en el escenario para interpretar sus colaboraciones con el artista.
También hubo tiempo para “Rockestar”, tema que vió por primera vez el directo, y para bajar a la pista y cantar cerca de sus fieles seguidores.
Sticky animó a su público hasta el final, terminando su actuación con “Diabo”, su tema por excelencia, y una frase que sólo un buen trapero puede decir: “Volveros locos hijos de puta, que es el último tema”. Y locos nos volvimos.
Terminamos de “Chingar” para escuchar un “Punany a mi best friend” de VYBZ Kartel desde la otra punta del recinto. Un sonido de corneta. Ahí estaba ya Merca Bae pinchando para hacernos pinch… digo, ¡bailar!
Y es que a partir de ese momento, de sexualidad y sensualidad fue la cosa. Los calores subieron: el dembow, el dancehall y el afrobeat se adueñaron de Absolut para no irse nunca más.
El tono subido siguió acompañando la noche, tras una Nadia Rose junto a su su Crew, de la que sólo podemos decir: PERFECCIÓN Y PODER, le siguió Flaca. De la música urbana cambiamos radicalmente al reggaetón puro y duro. Un estilo, que aunque no sea el favorito de todos, siempre nos hace, como diría Andrea Aritmendi, “perrear hasta abortar”.
Yxng Bane cerró esta gran cita de Absolut Manifesto 2019. Su primera visita a Madrid ha sido un auténtico sueño afro-swing con tintes de trap para nosotros. Esperamos que él también lo pasara bien y que, tras la espontaneidad de alguna chica “anónima” que subió al escenario para darlo todo con él, no piense que los españoles estamos demasiado locos, o sí.
¡Hasta la próxima Absolut Manifesto!