VETUSTA MORLA a través del tiempo.

Había muchos pretextos para justificar que Vetusta Morla cerrase 2018 actuando el pasado 30 de diciembre en el famoso WiZink Center, pero cada cual escogerá el que le quede más cercano: recientemente, su disco lanzadera Un Día en el Mundo ha cumplido 10 años, y al mismo tiempo, la cita coincidía con el 20 aniversario del primer concierto de la banda y el 40 aniversario de la actual Constitución Española.

Y diréis, ¿qué importancia tiene nuestra legislación sobre la celebración de un concierto? Porque fue gracias a esa Constitución que se desencadenaran los traspiés políticos que alimentaron el espíritu del sexteto, la esencia reivindicativa que subyace en sus canciones. Así que, tras ver como inconcebible la separación entre Vetusta Morla y protesta, llegamos a su primer gesto político, que retumbó hasta nuestros días y quiso ser conmemorado con un concierto de gran talla.shit-magazine-vetusta-morla-patygelduck-patricia-blas-013 shit-magazine-vetusta-morla-patygelduck-patricia-blas-011

A la hora de inicio prevista, el reclamo popular se intensificaba, y no fue hasta 20 minutos después que se nos desvelase la primera sorpresa del concierto: uno de los videoclips más humildes de la banda, concretamente el de Otro día en el mundo, que muestra al grupo interpretando la canción en acústico durante un paseo por las calles de Madrid, fue proyectado unos minutos, hasta que de repente, se desvaneció con una imagen de la banda tocando en el mismo formato por los pasillos del Palacio de los Deportes. La escena remataba con Vetusta Morla apareciendo sobre el escenario y pintando una bonita fotografía de ellos mismos con todo el público a sus espaldas.shit-magazine-vetusta-morla-patygelduck-patricia-blas-001 shit-magazine-vetusta-morla-patygelduck-patricia-blas-003

El telón quedaba abierto y los madrileños venían dispuestos a desenterrar sus raíces: Autocrítica, la primera de su álbum debut, revivía de entre los muertos para desplegar el manifiesto de Vetusta Morla. En su trabajo de recuperación de las viejas glorias le siguieron temas como Rey Sol y Pequeño desastre animal, incluso algunos pertenecientes a los primeros pasos de la banda antes de Un día en el Mundo como Mi habitación favorita.

No quedaba duda de la esencia de Vetusta Morla cuando Pucho, su frontman, nos aclaraba que por mucho que la industria les pida que huyan de la polémica en sus letras, ellos son y serán un grupo político, y venían a hacer justicia con su música.shit-magazine-vetusta-morla-patygelduck-patricia-blas-004 shit-magazine-vetusta-morla-patygelduck-patricia-blas-005 shit-magazine-vetusta-morla-patygelduck-patricia-blas-006 shit-magazine-vetusta-morla-patygelduck-patricia-blas-008

Posterior al fragor, la estampa bajó revoluciones con el fluir de La marea, que renació del setlist del grupo entre samples y aires de renovación, y Al respirar, siempre amiga del repertorio de Vetusta Morla. Para los más nostálgicos, se interpretaron canciones de otros álbumes como Boca en la tierra o la enigmática Los buenos, en un intento de sacarle brillo al patrimonio musical vetusto.

Rompiendo con protocolos, los de Tres Cantos decidieron incorporar a su puesta en escena la presencia de diversos invitados: las patillas de DePedro acompañaron a la banda en la mítica Maldita Dulzura, pero con los instrumentos en off y con una interpretación mucho más callejera. Posteriormente, la mesa amplió el número de comensales, con Xoel López, DePedro, Vetusta Morla y toda su diligencia cantando El amor valiente, un tema de Deluxe (antiguo proyecto musical de Xoel López) que ha acompañado a los vetustos a lo largo de su trayectoria profesional.

shit-magazine-vetusta-morla-patygelduck-patricia-blas-009 shit-magazine-vetusta-morla-patygelduck-patricia-blas-010 shit-magazine-vetusta-morla-patygelduck-patricia-blas-012

A medida que avanzaba la noche, la banda se reincorporó a su ruta habitual, e interpretó la Santísima Trinidad Copenhague Sálvese quien pueda – Valiente sin artificios ni estilismos del directo, con las mismas ropas de la versión de estudio, algo que nos remitía como un flashback al 2008.

Cerrar este concierto no solo implicaba poner punto y final a una noche emotiva, sino asomar la cabeza al 2019, por lo que Año nuevo venía como anillo al dedo después de hablar del pasado, y apuntar al futuro.shit-magazine-vetusta-morla-patygelduck-patricia-blas-015 shit-magazine-vetusta-morla-patygelduck-patricia-blas-014 shit-magazine-vetusta-morla-patygelduck-patricia-blas-016shit-magazine-vetusta-morla-patygelduck-patricia-blas-018

Finalmente, Un día en el mundo trascendió las pantallas y apostó por el directo, pavimentando un camino de furor que Saharabbey Road aprovecharía para dejar a 15.000 asistentes en un monólogo musical. Sentenciados a durar en el tiempo, Vetusta Morla cerraba así su fiesta de cumpleaños, haciendo ver que llenar el WiZink Center ya no les supone ningún reto.

shit-magazine-vetusta-morla-patygelduck-patricia-blas-019 shit-magazine-vetusta-morla-patygelduck-patricia-blas-017


Texto: Sento Soler.
Fotografías: Patricia Blas.

Shit Magazine utiliza cookies para recordar los post que más te gustan y llevarte a ellos con facilidad la próxima vez. Si sigues navegando por aquí, es que te has convertido en un "Shit adicto" y aceptas nuestra política de cookies, pincha el enlace para + info.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies